Todos se me ponen a dieta, ok???

Desesperados por bajar rápido, se someten a costosas dietas, a chin….y de donde sale el dinero pa’las dietas?

Políticos mejoran su figura rumbo a la competencia política en 2012.

¿Imagen, salud, moda? ¿Qué conduce a un político y en especial a los integrantes del gabinete de Felipe Calderón a seguir métodos tan radicales? Mmmmmm, quizá como luego es mejor tener un bonito aunque sea pendejo, igual y quieren aplicar eso…

Varios políticos han podido pagar costosas dietas, cuyos resultados son asombrosos por la velocidad de la reducción de tallas, claro con dinero baila el perro, o bueno en este caso no importa lo que cueste la belleza, “es un lujo pero creo que lo valgo, jajajajaja”.

Algunos lograron estilizar su figura con una dieta proteinada denominada Pronokal cuyo costo es hasta de 12 mil pesos mensuales. Mmmmmchalas, no me alcanzaría para una dieta, si me piensan dar 6 mil pesos mensuales, pues ni como…

Pero bueno, las tentaciones para los colaboradores de Calderón sobran. De un día para otro algunos integrantes del equipo presidencial comenzaron a verse muy grandes en sus trajes. Disciplinados, siguieron los consejos de sus nutriólogos y médicos, de no comprarse ropa en tanto siguieran en tratamiento. Andale, buena psicología!

Cuando Blake se estrenó en el cargo, el 15 de julio de 2010, sus trajes le quedaban más
“Cada quien trae un proyecto personal y habrá que ver el año que entra cuántos de ellos (los funcionarios a dieta) son candidatos. No sólo hablamos de la elección presidencial, sino de las campañas a senadores, diputados y presidentes municipales. Cuando lleguen vamos a decir: ‘con razón bajó 40 o 10 kilos’”. Exacto! Si al parecer lo que mas venden es imagen, ni que fuera concurso de Miss Universo!

“El político es pragmático. Si tiene que bajar de peso lo hace, si hay que cargar niños y besarlos lo hace, y si hay que ir a un reality show también, sobre todo en una sociedad inmadura y mal educada por los medios de comunicación, donde importan menos las propuestas y más si estás bonito o no.”

Sin importar clases sociales, el problema de fondo está en la cultura del engaño y del consumismo: engórdalos hasta que revienten y luego promételes que van a bajar en cuatro semanas lo que subieron en cuatro años. Cierto! Otro engaño que tenemos y no lo habíamos observado, consumismo puro…